La elección de los colores
Antes que nada es importante la elección de los colores, que sin duda, serán la base del ambiente que queremos crear en las paredes o los muebles de la habitación de tu hijo. Los colores neutros y en tono pastel transmitirán una sensación de suavidad y descanso.
El beige es un color tranquilo y luminoso que conviene tanto a los niños como a las niñas. Para dar un toque poético, opta por el verde menta, el rosa empolvado, el azul cielo o el lila. Los colores más fuertes, como el naranja, el terracota o el verde kaki, están permitidos únicamente en habitaciones bañadas de luz natural. Si lo que deseas es ampliar visualmente el espacio, el blanco es tu mejor elección.
Materiales a elegir
Ropa de cama fabricada en algodón y percal
Para la ropa de cama de los niños, elige materiales naturales. La ropa de cama infantil confeccionada con algodón orgánico, algodón de 57 hilos o percal de algodón es la más adecuada porque es apta para su piel sensible.
Funda nórdica en gasa de algodón
Considera también las fundas nórdicas fabricadas en gasa de algodón, un material suave y vaporoso que originalmente se utilizaba para los pañales de los bebés. Hoy se encuentra en la ropa de cama de los niños. Su estilo vintage y decididamente moderno aportará un espíritu acogedor al dormitorio de tu pequeño.
Cortina en poliéster y visillo en lino
Viste las ventanas de la habitación para que tus hijos puedan pasar una larga mañana apacible en cama sin que les moleste la luz del día. Las cortinas opacas fabicadas en poliéster o lana oscurecen sutilmente la habitación, mientras que los visillos transparentes en lino o algodón claro dejan entrar la luz del sol.
Alfombras naturales
Por último, añade un toque acogedor en un abrir y cerrar de ojos simplemente colocando una alfombra sintética imitación piel de oveja. Las alfombras de fibras sintéticas son más accesibles que las de fibras naturales como el algodón, el yute o el junco marino, pero estas últimas son preferibles por sus propiedades hipoalergénicas.
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Dulcemente amueblado
Los muebles de madera son ideales para la habitación de un bebé, ya que han recibido poco tratamiento químico y darán calidez a la habitación de forma instantánea. Robustos pero ligeros, los sillones o mecedoras fabricados en ratán son perfectos para los ratos de lectura o para ayudar a arrullar a tu bebé. Cerca puedes colocar una pequeña biblioteca.
Para crear un pequeño espacio donde jugar, leer o incluso dormir la siesta, es imprescindible un tipi o una cabaña. Coloca cojines para el suelo con formas y dibujos divertidos, o pequeñas alfombras para dar la impresión de un lugar acogedor y cálido. ¡A tu pequeño le encantará!
Iluminación para un ambiente suave y tanquilo
Elige luces suaves y evita la iluminación indirecta. La lámpara de noche es un elemento importante para dar seguridad al niño y ayudarle a superar su miedo a la oscuridad. La luz nocturna difundirá una luz relajante, además existen en todo tipo de formas y diseños como flamencos rosas, arco iris, lunas... Algunas incluso pueden proyectar estrellas o animales en el techo de la habitación del bebé.
Una pequeña lámpara de cabecera será esencial para los ratos de lectura. Piensa también en pequeñas guirnaldas de luces blancas cálidas en forma de estrella fugaz o cometas. Una ristra de luces con borlas o bolas de colores aportará dulzura a la habitación de tu bebé. Estas bonitas luces tranquilizarán a tu pequeño y crearán un ambiente cálido y mágico.
Decora las paredes
Existen numerosas posibilidades para hacer que la habitación de los más pequeños sea realmente acogedora. Papel pintado, espejos, pegatinas, marcos, trofeos, atrapasueños... iluminarán una habitación triste y con paredes vacías. Las formas lúdicas estimularán la imaginación de tus hijos, así que no dudes en utilizarlas. Elige su animal favorito en un gancho de pared: como un unicornio, león, elefante.... en fin...
Para ampliar la habitación y aportar una buena cantidad de luz, el espejo será el elemento esencial. Espejos de soles, rectangulares o redondos, de ratán o de madera... los modelos son muy variados. No olvides fijarlos en alto y elegir modelos sólidos, ya que los cristales rotos podrían ser peligrosos para tus pequeños. Por último, una tira de papel pintado de color o estampado bastará para dar profundidad a la habitación.
Un acogedor lugar de descanso
Lo primero que volteamos a ver en la habitación es la cuna o la camita de tu hijo, este elemento marca el ambiente general de la habitación. Para la zona de descansp crea un capullo que sea realmente acogedor para los niños. Si tus pequeños son más grandes, puedes multiplicar las almohadas, los cojines y las mantas para crear un ambiente cálido propicio a la relajación.
Dale relieve a la habitación con un dosel de cama todo en vertical. Será un acogedor refugio para ellos brindando la mayor felicidad y confort a los más pequeños. Además tendrá la ventaja de protegerlo contra los mosquitos que a veces pueden entrar en la habitación durante el verano.
Soluciones adaptadas para ordenar la habitación
Una habitación infantil ordenada creará un espacio acogedor. La zona para guardar sus cosas debe ser práctica para que el niño tenga a mano todas sus cosas favoritas y al mismo tiempo le sea fácil ordenarlo.
Cestas de almacenaje, cajas de madera, cofres y otros muebles pequeños son excelentes ideas para odernar que además ayudan a la decoración. No tienes por qué elegir productos con diseños infantiles. La cesta de almacenaje de mimbre o ratán que utilizabas en tu salón encontrará fácilmente un lugar en la habitación de tu hijo y le dará un toque chic y exótico.
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Juguetes como elementos de decoración
Para crear una decoración de dormitorio lúdica y estéticamente agradable, los juguetes son esenciales. El dormitorio alimenta la imaginación de tu hijo. Elige juguetes de madera de colores o simpáticos peluches. Ya sea niño o niña, todos los bebés se quedarán boquiabiertos ante un móvil.
A medida que tu hijo crece, es importante limitar el area de juegos, para que la habitación resulte agradable, cada área debe tener una única función. Para lograrlo, elige pintar las paredes o pon una alfombra grande en el suelo.